Tu eres lo que comes y como lo comes.
Mindfulness es la técnica que te enseña a prestarle atención a lo que se está haciendo, y a recordar prestarle atención a lo que se tendría que estar haciendo. Todo esto se traduce en “atender y darse cuenta”.
Aplicar Mindfulness a tu alimentación diaria te permite desactivar el piloto automático que te lleva a comer más cantidad de lo que desearías, o alimentos que no deberías y prestar atención plena a la comida, comiendo de forma consciente.
Con Mindfulness se toma consciencia de donde está el foco de tu atención, se enfoca la atención en lo que pasa aquí y ahora. No se está preocupado por el futuro ni se le da vuelta al pasado. Se presta atención suspendiendo el juicio y aceptando lo que ocurre en cada momento.
Cada vez que se va a comer se debe tener plena consciencia de ello, saborear cada bocado, tomar consciencia de las señales de hambre y saciedad, prestar atención al acto de comer en sí, a la velocidad con la que se come y no a cualquier otra tarea, como ver la televisión, teléfono o correos.